A Michael, uno de nuestros mejores gemólogos en Novita, se le pidió que escribiera un artículo breve pero perspicaz para aclarar los conceptos erróneos sobre los diamantes frente a las moissanitas. Con moissanitas, hay empresas que se especializan en vender estos simuladores de diamantes. Como resultado, desafortunadamente, hay bastante información engañosa que caracteriza a las moissanitas. Así que queremos aclarar las verdades.
¿LOS DIAMANTES Y LAS MOISSANITAS SE VEN IGUALES?
¿PARECIDO O DIFERENTE?
En resumen, se ven diferentes. Aquí te explicaremos las diferencias en términos sencillos para que tú también puedas empezar a verlas.
Es común que las moissanitas tengan tintes. Si evalúa una moissanita utilizando la misma clasificación de color que se aplica a los diamantes, que es una escala de "D" a "Z", verá que, en promedio, tiene un color "J". Este color no se recomienda en diamantes porque muestra un tinte significativo de color marrón que es claramente visible a simple vista e inexperto.
Lamentablemente, hay muchas empresas que intentan aprovecharse de las personas sin educación, al afirmar que ofrecen moissanitas de color "H" que aún no han sido verificadas por los expertos de la industria. Como gemólogo, he tenido la oportunidad de ver muchas de esas moissanitas, ninguna de las cuales parece tener el color "H".
Los destellos de moissanita son únicos y se ven como los colores del arcoíris. Al comparar diamantes y moissanitas, una cosa más se destaca a simple vista y sin experiencia. Es la diferencia en los colores de los destellos. Mientras que los destellos de los diamantes son blancos, las moissanitas producen colores iridiscentes. Esta diferencia significativa en los colores se debe a que las moissanitas son pleocroicas: muestran dos o tres colores cuando se ven desde diferentes ángulos.
Las propiedades ópticas de los diamantes son tales que no cambian de color cuando se ven desde diferentes ángulos. Por el contrario, todas las moissanitas tienen diferentes apariencias de color, ya que son de doble refracción. Esta parte se vuelve un poco más técnica, pero no te preocupes, nos ceñiremos a términos simples. Esta peculiaridad solo se encuentra en las moissanitas y nunca en los diamantes. En pocas palabras, la forma más fácil de notarlo es examinar una moissanita desde la parte superior y observar de cerca el lugar donde se unen las facetas. Notarás que en lugar de ver solo una articulación, verás dos.
Ten cuidado con las empresas que afirman haber encontrado una nueva forma de cortar una moissanita que evita que ocurra la doble fracción. Esta información aún ha sido muy dudosa ya que la doble fracción no proviene de la forma en que se corta una piedra, sino del material del que está hecha.